El Corcho es la corteza del alcornoque (Quercus Suber L.), un árbol milenario que crece en la cuenca mediterránea, formando los famosos Montados.
Extraído cada nueve añossin dañar ni talar el alcornoque, el corcho es una de las mayores maravillas de la naturaleza. Es un tejido vegetal completamente natural y, por tanto, biodegradable. Su capacidad para retener CO2 hace del corcho un ejemplo de sostenibilidad y un poderoso aliado contra el cambio climático, contribuyendo significativamente a reducir las emisiones de dióxido de carbono.
Con su composición química única, el corcho es uno de los materiales más increíbles del planeta. Observado al microscopio, el corcho tiene una estructura similar a la de una colmena, donde cada célula tiene forma de prisma pentagonal o hexagonal. Cada centímetro cúbico de corcho contiene unos 40 millones de células.
Alrededor del 45% del corcho está formado por suberina. También están presentes otros componentes como la lignina, los polisacáridos, los taninos y los ceroides, que ofrecen una enorme variedad de cualidades. Su composición química única lo hace esencial en los tapones de corcho, el producto más famoso derivado de este material.
El corcho posee propiedades que lo hacen ideal para diversas aplicaciones, especialmente el aislamiento térmico y acústico, la resistencia a las altas temperaturas y la elasticidad. Su ligereza, comodidad y tacto suave lo convierten en el material favorito de diversas industrias.
Además, es naturalmente hipoalergénico y resistente a la compresión, características que lo hacen esencial para la producción de tapones de corcho, donde Amorim Cork es líder, ofreciendo la más amplia cartera del mercado.
El Corcho es la corteza del alcornoque (Quercus Suber L.), un árbol milenario que crece en la cuenca mediterránea, formando los famosos Montados.
Extraído cada nueve añossin dañar ni talar el alcornoque, el corcho es una de las mayores maravillas de la naturaleza. Es un tejido vegetal completamente natural y, por tanto, biodegradable. Su capacidad para retener CO2 hace del corcho un ejemplo de sostenibilidad y un poderoso aliado contra el cambio climático, contribuyendo significativamente a reducir las emisiones de dióxido de carbono.
Con su composición química única, el corcho es uno de los materiales más increíbles del planeta. Observado al microscopio, el corcho tiene una estructura similar a la de una colmena, donde cada célula tiene forma de prisma pentagonal o hexagonal. Cada centímetro cúbico de corcho contiene unos 40 millones de células.
Alrededor del 45% del corcho está formado por suberina. También están presentes otros componentes como la lignina, los polisacáridos, los taninos y los ceroides, que ofrecen una enorme variedad de cualidades. Su composición química única lo hace esencial en los tapones de corcho, el producto más famoso derivado de este material.
El corcho posee propiedades que lo hacen ideal para diversas aplicaciones, especialmente el aislamiento térmico y acústico, la resistencia a las altas temperaturas y la elasticidad. Su ligereza, comodidad y tacto suave lo convierten en el material favorito de diversas industrias.
Además, es naturalmente hipoalergénico y resistente a la compresión, características que lo hacen esencial para la producción de tapones de corcho, donde Amorim Cork es líder, ofreciendo la más amplia cartera del mercado.